Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
Cinco mujeres han marcado su vida: la tenue Regina Grediaga, la promiscua Carlota Besares, la bella Ana Segovia, la tersa María Angélica Navarro y la adicta Cecilia Miramón. Las ha tenido y perdido a todas varias veces, han ido y venido de otros hombres, fundado hogares y tenido hijos fuera de la órbita amorosa de Adriano. Pero regresan a él una y otra vez hasta coincidir las cinco, por unos meses luminosos, en la apurada agenda erótica del historiador.