Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
Una manzana cae, los planetas giran majestuosamente alrededor del Sol, el remolino de un agujero negro ejerce su atracción fatal (¡y es fotografiado directamente por primera vez!), diminutas ondas gravitacionales fluctúan en el tejido invisible del espacio-tiempo. Estamos ante distintas expresiones de la enigmática fuerza de la gravedad. ¿Cómo la entiende la ciencia desde Newton hasta Einstein, pasando por los intentos de descifrarla en la escala de la gravedad cuántica? ¿Cómo la retrata la literatura y el cine? ¿Qué reflexiones filosóficas nos despierta?