Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
El protagonista de esta historia tiene una mascota nada común un mastodonte. Como todos los mastodontes, el suyo es enorme y feroz, y además muy rebelde. Cada vez que le pide algo, Mastodonte le responde ¡No!. Pero cuando su amo grita a todo pulmón ¡Más te vale, Mastodonte!, las cosas cambian y se complican. Y es que no hay nada más difícil en el mundo que domesticar a un mastodonte, aunque también tiene su recompensa.