Marc Slonim proporciona una admiorable introducción pqara los que se inician por los caminos de la novela, el cuento, el teato y la poesÃa rusos y un recordatorio vivificante para los viejos entusiastas de la gran riqueza de esta literatura y de sus más altos representantes.
Si Ricky Desmond tan solo pudiera hacer entrar en razón a su madre, la convencería de que no pertenece al hospital psiquiátrico Brookline. Allí no hay ningún paciente como él ni el hombre que cree que puede volar ni la mujer que asesinó a su esposo. Todo lo que Ricky hizo fue perder la cabeza un poco y solo ocurrió una vez.