El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
En esta obra Cuéllar juega con las preconcepciones de los actores que se originaron con la Commedia dell'Arte italiana y que tuvieron una consolidación en el imaginario popular en los siglos XVII y XVIII a partir de las comedias de Molière y de Goldoni. Las descripciones del autor en esta novela participan de la literatura costumbrista al ofrecer un elenco detallado de las características físicas de los personajes con el fin de que el lector cuente con suficientes elementos para elaborar una imagen concreta en sus generalidades.