Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
La teoría de las «inteligencias múltiples» de Howard Gardner revolucionó el mundo de la educación y de la psicología en las postrimerías del siglo XX. En efecto, la sugerente idea de que existen diferentes capacidades humanas independientes, desde la inteligencia lingu?ística hasta la que supone el conocimientode uno mismo, ha atraído ya a innumerables educadores, padres e investigadores interesados por el papel del individuo en este proceso. El presente libro ofrece una síntesis de toda esta labor con el objetivo de que resulte accesible para todo tipo de lectores. En otras palabras, una propuesta moderna y arriesgada que ya representa toda una revolución, pues su meta es la búsqueda de informaciones directas acerca del modo en que la gente desarrolla capacidades que luego resultan ser muy importantes para su modo devida: la inteligencia lingu?ística, la lógico-matemática, la espacial, la musical, la corporal y cinética, la interpersonal y la intrapersonal. La conclusión no es sólo que la escuela del futuro debería centrarse en el individuo y ayudarle a desarrollar todas sus inteligencias, sino también que cada persona tiene su propia manera de combinarlas y utilizarlas, aunque quizá no la conozca aún. En cualquier caso, la misión apasionante de este libro es lograr que la descubra.