Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
Padre nuestro es una recapitulación de la presencia del padre. Si en un primer momento obedece a una suerte de mirar en la memoria, en una segunda instancia el poema amplía su perspectiva al incorporar a otra figura relevante, la de un niño, que alternará sus apariciones hasta formar parte del conjunto. El poema nace como una ofrenda a la oración católica por excelencia. Y en ese acto se congregan ecos de la infancia.Francisco Magaña ha sido becario del Fondo Estatal para la Cultura y las Artes de Tabasco y del Fonca. Entre otros reconocimientos, en 1999 recibió el premio Tabasco de poesía "José Carlos Becerra" y el premio nacional de poesía "Carlos Pellicer" para obra publicada, y en 2001 el premio internacional de poesía "Jaime Sabines".