El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
Esta es la historia de Enrique, un niño al que le encantan los libros, pero no como a cualquier niño pueden gustarle. Un día, mientras tenía en una mano una paleta y en la otra un libro, Enrique, distraídamente