El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
Durante los últimos veinticinco años un buen número de poetas, narradores, dramaturgos y ensayistas han enriquecido y transformado nuestra tradición literaria. Se trata de escritores originales y activos, cuyas obras -parte fundamental del panorama de las letras mexicanas- merecen ser mucho mejor leídas y conocidas. La colección La Centena, en sus vertientes de narrativa, poesía, teatro y ensayo está dedicada a recuperar esas obras significativas y a valorar a sus autores.Adolfo Castañón es poeta, narrador, cronista, ensayista, traductor y editor en una labor múltiple que tal vez puede sintetizar su oficio como lector, oficio que no por serlo deja de ser vocación apasionada, como demuestra en libros como La gruta tiene dos entradas o Arbitrario de la literatura mexicana. Entre sus ensayos más recientes hay que destacar Lectura y catarsis (Ediciones Sin Nombre, 2000). En Nueve del treinta Castañón se ocupa de autores mexicanos nacidos en el periodo que señala, propiciando el diálogo entre ellos, develando tanto lo que los separa como lo que los reúne, en una original visión de escritores que son el presente de nuestra literatura.