Alfonso Reyes dijo de Goethe que si pecó por algo fue por querer aplicarlo todo al alcance de los sentidos, negándose a la mano oscura de la matemática o a las abstracciones filosóficas, y agregó: "nunca quiso pensar en el pensamiento, sino sólo en las cosas". Con su jugosa exposición, Alfonso Reyes nos pinta la existencia, obra y contorno del genio creador de Fausto.
Producto de la experiencia personal, con la cual se muestra una preocupación social en torno a los barreteros y los gambusinos, este libro de cuentos, publicado en 1882, tiene el proposito de conformar una literatura nacional alimentada con temas propios.