OTHELLO, el clásico de William Shakespeare llevado a la pantalla grande por Orson Welles en 1952. El moro de Venecia es un oficial que se encuentra enamorado de Desdémona y el cual deberá luchar primero contra su futuro suegro, Brabancio, un racista que no desea ver a su hija casada con un negro. Después, deberá luchar contra el demonio de los celos cuando Yago siembra la semilla de la desconfianza en Othello, haciéndole creer que su esposa le es infiel con Casio, lo que desencadena el ya famoso y trágico final