Blaise Pascal (1623-1662) hombre de su tiempo, concilió el estilo del pensamiento directo con el arte de una retorica persuasiva, que empleaba a un tiempo la paradoja, el asombro y la sorpresa. Esta caracterÃstica estarÃa presente por igual en los dos objetos de su estudio: las ciencias fÃsicas y la antropológica cristiana.
En 1956 el doctor Paul Kuroda propuso la existencia de reactores de fisión nuclear naturales en épocas geológicas pasadas. Sin embargo, como a menudo sucede, sus colegas no le creyeron. En 1972, H. Bouzigues y sus colaboradores realizaron, en la planta de materiales fisionables de Pierrelatte, un análisis que midió una pequeña pérdida de uranio-235 en los minerales de este elemento. Encontraron que esa pérdida se debía a un fenómeno extraordinario ocurrido en Gabón, África, cuando ese territorio era parte de la Pangea: el uranio-235 faltante se había consumido en una serie de reactores nucleares naturales hace dos mil millones de años. En este libro se relatan los estudios y hechos que han llevado a la comprensión de este fenómeno.