Según el crítico literario Sergio González Rodríguez, Carlos Martín Briceño ha logrado un equilibrio entre la potencia vital y la potencia intelectual. Cada pieza suya reconstruye vivencias de sus personajes, que conforme entran en zonas extremas de violencia, sexualidad o extrañamiento de lo cotidiano superan en su mente lo acontecido a través de pensamientos, percepciones, vislumbres de lucidez o incertidumbre. En estos 25 cuentos se va soltando la tensión de a poco. Pareciera que el acompasado movimiento del cálido océano que baña el litoral de la península yucateca ha dotado a Martín Briceño de un ritmo diferente, de una cadencia que embriaga con lentitud. En vez de profusas descripciones y acciones rápidas, predominan complejos pensamientos internos de los protagonistas, muchas veces avergonzados o arrepentidos de llevar a cabo las acciones que se cuentan. Venganza, traición, infidelidad, vejez, divorcio, hartazgo de la vida en pareja son los temas alrededor de los cuales giran las historias de esta antología.