Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
En un artículo que Paul Westheim publicó a mediados del siglo XX, "El nuevo grabado en madera mexicano", se refirió a Francisco Díaz de León como un enamorado del arte en blanco y negro. Es auténtico y fecunda su pasión por todo lo que estampa, impresión, tipografía y muy especialmente por todo lo que en México se trabaja, logra y crea en este campo.Está familiarizado con todas las técnicas gráficas y todas las domina magistralmente. Un artista arraigado en lo más hondo del oficio y un pedagogo excepcional, que tiene el raro don de enseñar "el arte del oficio".