Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
Mi vida como diplomático fue el título de la primera edición de las cartas de Margaret Plahte, en las que narra sus vivencias como esposa de Michael Lie en Alemania, México y España. Camilla Plahte, sobrina de Maggie, reunió recientemente toda la correspondencia que relata las aventuras vividas en México por el matrimonio durante la Revolución mexicana, entre 1910 y 1920. Margaret Plahte llegó a México para los festejos del Centenario de la Independencia, durante la presidencia de Porfirio Díaz, y salió cuando Venustiano Carranza intentaba organizar de nuevo el país. Sus agudos puntos de vista muestran a los personajes de la época desde una óptica distinta a la conocida por los libros de historia, elevándola a las alturas de una moderna Madame Calderón de la Barca. Su curiosidad y presencia constante en la cumbre de los círculos diplomáticos capitalinos deja testimonio de la conflagración mexicana.