Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
El amor, según postula Dolores Dorantes en este libro, también es una fábrica. A través de un monólogo trágico y existencial, la autora invoca una voz poética que produce y erige consistencia con los sueños y la emoción vital, que llama a lo sacrificial. Este libro construye también versos liberados, innovadores, versos que hablan y se dirigen a un alguien omnipresente: el dios, el demonio, el amador. Con una voz arriesgada y novedosa, fronteriza, Querida fábrica será una revelación para el lector que se preocupe por indagar en las entrañas de este libro.