Con Gurí, el lector tiene en sus manos un retrato costumbrista del Uruguay de finales del siglo XIX y de esa sociedad ampliamente estratificada, de los grandes hacendados a la plebe harapienta, que fue pasto de revueltas, revoluciones y transformaciones sociales que marcaron, en definitiva, el rostro de la pampa y que dieron al traste, más tarde que temprano, con ese género fundamental que fue y es la literatura gauchesca