Ensayos de homenaje en el primer centenario del nacimiento del filósofo español, que abordan diversos aspectos de la obra de Ortega. Los cuatro trabajos dibujan con rigor algunos de los horizontes centrales del quehacer filosófico hispánico en el mundo actual.
En esta obra el autor realiza preguntas como ¿Acaso tienen las artes un origen común?, ¿Hay correspondencias entre la danza y la pintura?, por lo que plantea que el origen de las artes puede ser un tipo de relación de nuestra especie con el mundo, un momento fundacional, complejo y trascendente, al que llama embriaguez. Las artes vendrían siendo, entonces, variaciones sobre esa embriaguez fundamental; las artes no son el tema principal de esta libro, son su esencia.