Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
Por esto, todos los profetas tuvieron acierto, y se desgraciaron cuando estaban desarmados». (Maquiavelo). Esta afirmación de Maquiavelo en El Príncipe sugirió al historiador y biógrafo Isaac Deutscher el título de su clásica y monumental trilogía sobre Trotsky (El profeta armado, El profeta desarmado, El profeta desterrado), cuyo primer tomo fue publicado en inglés en 1954 por la editorial de la Universidad de Oxford, y en castellano en 1966 por editorial Era de México y en el 2007 por Lom ediciones.