Ensayos de homenaje en el primer centenario del nacimiento del filósofo español, que abordan diversos aspectos de la obra de Ortega. Los cuatro trabajos dibujan con rigor algunos de los horizontes centrales del quehacer filosófico hispánico en el mundo actual.
Gógol nos relata, en este clásico imperdible, la historia de Pável Ivánovich Chíchikov, un funcionario de origen incierto que llega a un pequeño pueblo ruso con un plan peculiar: comprar “almas muertas”, es decir, los siervos fallecidos que aún figuran en los registros oficiales de propiedad de los terratenientes. Chíchikov, sabiendo que todavía se pagaban impuestos por esos siervos, decide comprar estas “almas” a bajo costo con el propósito de utilizarlas como garantía para enriquecerse.
Las almas muertas es, en esencia, una crítica mordaz a la corrupción, la codicia y el vacío moral de la sociedad rusa de la época. A través de los diversos encuentros entre Chíchikov con los terratenientes, Gógol expone una amplia variedad de personajes grotescos, egoístas y absurdos, que representan los defectos de la sociedad y el deterioro moral de una Rusia del siglo XIX.