Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
PREMIO RENAUDOT DE NOVELA 2017
Desde 1949, año en que llegó clandestinamente a Argentina, y hasta su muerte en 1979, Josef
Mengele se escondió, o vivió «discretamente», en Argentina, Paraguay y Brasil bajo diferentes
nombres, y a veces con el suyo. Sostenido económica y moralmente por su familia desde Alemania
o por oportunos «protectores» filonazis, y amparado por, entre otros, Perón y Stroessner, el médico
que en Auschwitz cometió atrocidades sinnúmero nunca fue detenido ni juzgado, a pesar de que lo
buscaban el Mossad y el célebre cazador de nazis Simon Wiesenthal. Soberbio, vanidoso y
convencido hasta el final de haber «servido» a Alemania y a la humanidad, el llamado Ángel de la
Muerte de Auschwitz trató de llevar una vida común, e incluso regresó en una ocasión a Europa,
hasta que se convirtió en un claustrofóbico prisionero de sus propias esperanzas. El relato glacial,
introspectivo y esclarecedor de sus pasos hasta el fin de sus días, y de las complicidades personales
y políticas que explican por qué nunca pagó por sus crímenes, dibuja un personaje imposible de
olvidar.