Marc Slonim proporciona una admiorable introducción pqara los que se inician por los caminos de la novela, el cuento, el teato y la poesÃa rusos y un recordatorio vivificante para los viejos entusiastas de la gran riqueza de esta literatura y de sus más altos representantes.
Eros estaba muy lejos, pero sus acciones pudieron percibirse en Mesoamérica donde los nahuas vivieron las pasiones del amor y el sexo. En este libro, Miguel León Portilla acerca los vocablos erótica y náhuatl para encontrarnos con una tradición literaria indígena en torno a ese amor que llamamos erótico.