El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
Las dos obras que conforman Violento interino, nos transportan al teatro del absurdo de los años cincuenta, donde la incomunicación y las relaciones fallidas son su principal característica. La primera obra que da el título al libro, es la historia ambigua de un hombre que no recuerda su pasado --o podría ser que se tratara de otro con el mismo nombre y la misma fisonomía-- y despliega el tema de la alteridad de manera inquietante y en tono sardónico. Extraña fábula empresarial nos traslada a un mundo laboral donde las apariencias cobran más importancia que los conocimientos. En esta obra, el autor utiliza el absurdo como leitmotiv para hacer una aguda crítica social.