Desde hace tiempos inmemoriales, una de sus principales preocupaciones de la humanidad ha sido la conservación de sus riquezas, cualquiera que ellas sean. Con el aprecio de los diversos documentos que fundan, respaldan o prestigian a un pueblo, se creó la necesidad de ubicarlos en un lugar preciso, no solo en cuanto al espacio, sino también en lo relativo a la jerarquía social.