Para Patricia Chandomí, el oficio de la poesía resulta una
catarsis constante. A través de la
maleza de historias y recuerdos nos presenta una estrecha vereda desde la cual
se puede recorrer cada uno de los pasajes que componen este volumen. Con cierta complicidad voyeurista por parte
del lector, la autora nos invita a presenciar cada acto de entera sinceridad
que en “Guanábana” propone. Esta
compacta reunión de poemas incitará a tomar parte activa de su compleja
emotividad, mediante una lectura a trasfondo y a la luz de la sensible
exaltación del discurso poético.