El presente breviario compara dos conceptos radicalmente opuestos de la moralidad, los de Aristóteles y Spinoza, ambas las más plausibles de todas las filosofÃas morales. Examina la relación entre intuiciones morales y teorÃa moral, y las ideas contrastantes de normalidad moral y conversión moral.
"He dudado tanto en escribir estas páginas, es que yo tenía algún motivo de vida para encerrar en el interior los secretos de mi pobre vida: No, es que la pereza me consume, es que hay algo pesado como el plomo que embarga mi cerebro. Decididamente, el tedio mina mi existencia, el desengaño ha segado en flor mis esperanzas, tengo hielo en el corazón".Con estas líneas comienza Altamirano, en 1869, sus diarios; tienen treinta y cuatro años y como buen romántico se siente acabado.