No resulta infrecuente ni extraño que Gerardo Deniz sea considerado un escritor peculiar, insólito y críptico. Su escritura, que procede de la erudición no siempre azarosa de un lector, de un químico, de un corrector editorial, de un traductor autodidacta, de un paseante, parece original e imposible de imitar. En Red de agujeritos, Fernando Fernández ha reunido sus colaboraciones periódicas en la revista Viceversa, las cuales no prescinden de un sentido del humor natural e íntimo que incita observaciones incisivas, comentarios sagazmente distraídos, remembranzas de lecturas y gatuperios, de curiosidades científicas, de historias profesionales de la psique —incluido un diálogo austral—, del análisis de Juan Almela de un poema de Gerardo Deniz ni del interrogatorio al que Fernando Fernández, que era el director y fundador de Viceversa, lo sometió en aquellos años.