Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
Palabra y poder es una serie de ensayos que funcionan como interrogantes y planteamientos en torno a la palabra como logos, como origen y destino. Para el autor, remitirnos a la palabra es ampliar nuestra visión del mundo; es ir más allá de la voz literaria, es abismarnos en la reflexión. Estos ensayos se remontan al origen de la palabra, a la fuerza que adquiere en la escritura, a su poder simbólico a través de la literatura universal. Para Juan Antonio Rosado, "el ensayo literario, en particular, no se contenta con experimentar el placer o el malestar estético ante la lectura o recepción de una obra de arte, sino que intenta traducir -en la medida de lo posible- ese placer (o ese malestar) en palabras, desde un cuestionamiento a menudo racional, pero en el que además interviene la pasión, sin la cual no habría ningún género de impulso".