Los avatares del idioma castellano en América, en sus diversos afluentes, han contribuido a la riqueza idiomática de los países hispanoamericanos. Buscar la unidad de lengua entre ellos no es atentar contra tal riqueza, sino más bien —de acuerdo con el autor de este libro— vigorizar las simpatías y las relaciones de estos pueblos “hasta hacerlos uno solo”. Es la idea que quieren compartir estas páginas sabias y amenas, extractadas de una de las obras fundamentales de su autor, las Apuntaciones críticas sobre el lenguaje bogotano, obra que conoció numerosas ediciones en su tiempo y que proyectó a Rufino José Cuervo como uno de los más importantes estudiosos del idioma castellano. Valiéndose de obras literarias medievales y del Siglo de Oro, lo mismo que del habla popular, aquella de los oficios y de las expresiones urdidas de acuerdo con la condición social, Cuervo analiza y expone varios niveles de la lengua castellana —léxico, sintáctico, filológico— mediante la comparación. Y lo hace dentro del movimiento vital del propio idioma, en un tono ligero de charla amistosa y cordial que no desmiente el valor erudito de su exposición.