Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
El reportero Ryzard Kapuscinski, el compositor Arvo Pärt, los Premio Nobel de Literatura José Saramago y Gabriel García Márquez conviven en estas páginas con candidatos nominados a ese premio sueco, como Bob Dylan pero sobre todo con poetas anónimos: los hacedores de la cultura en el mundo cotidiano: bailarines de danza butoh, músicos jarochos, Patti Smith, Lou Reed, Laurie Anderson, James Brown, Madredeus, Wagner en el corazón de la selva del Amazonas, música y magia, un albañil con doctorado en Humanidades que vive en Detroit y es una leyenda, un músico de culto, la suma del mundo y sus asombros. Crónicas de conciertos, reportajes de largo aliento, entrevistas, ensayos, reseñas de discos, testimonios y reflexiones. Literatura periodística. El asombro que da sentido a una Sala de Redacción.
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