El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
Aunque no se refirió a ella como una de sus vocaciones frustradas, entre las cuales recordaba la arquitectura, la pintura, la ópera, el toreo y que acaso determinaron su vocación de escritor, pues mediante la escritura quizá pretendía sublimar la substancia de otras aspiraciones o la esencia de un pasado vivido en los sueños, en el principio Salvador Elizondo se imaginó como científico