El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
Cinco comunistas, entre ellos una mujer, son deportados a las Islas Marías, como lo fue el propio autor cuando era muy joven. Junto a ellos, los demás inasimilables de la sociedad, personajes perpetuos de la obra revueltiana prostitutas, homosexuales, rateros. Los lisiados que fungen como esbirros completan el cuadro anómalo en que Revueltas pone en escena por primera vez sus dos compromisos el político y el literario.