Por ser hijo de yucatecos - de hecho de padre campechano y de madre yucateca- y por hacer nacido en la ciudad de M?xico soy lo que en la pen?nsula se suele llamar un "yucahuach". Pero qu? duda cabe, por estas mis venas, qui?ralo o no, corre sangre yucateca o, si se prefiere, peninsular, es decir, de la hermana Rep?blica de Yucat?n, como reza la ir?nica expresi?n. Por ambas partes desciendo de una vieja estirpe en donde lo espa?ol y lo maya se mezclan de tal modo caprichoso que mis or?genes se pierden en los laberintos del espacio y el tiempo, del azar y del amor.Tal vez por ello he decidido escribir este cuaderno: para rescatar mis ra?ces. El trayecto que emprenderemos juntos es, simult?neamente, un viaje sentimental, un ?lbum de recuerdos, un retorno al origen, un recorrido hist?rico y anecd?tico as? como la cr?nica de la visita a algunos lugares de la pen?nsula que han marcado a mi familia.