Marc Slonim proporciona una admiorable introducción pqara los que se inician por los caminos de la novela, el cuento, el teato y la poesÃa rusos y un recordatorio vivificante para los viejos entusiastas de la gran riqueza de esta literatura y de sus más altos representantes.
En 1803, el barón Alexander Von Humboldt recabó varios documentos históricos en México, entre ellos un códice que hoy lleva su nombre: el Códice Humboldt. El fragmento 1 contiene la nómina de los tributos que el señorío de Tlapa-Tlachinollan entregaba a los mexicas. Esta es la primera referencia que tenemos del interés científico por conocer y estudiar la obra pictográfica producida en el actual territorio guerrerense.En la actualidad, con el registro que han elaborado los autores, el material conocido se ha incrementado a 62 códices, los cuales se presentan en este libro.La descripción y el breve análisis de tan rica documentación se acompañan de un catálogo de todo el material identificado, que incluye sus orígenes, temática, estado físico, estilo pictográfico e investigaciones a que ha dado lugar. Así, este trabajo pretende constituirse en una fuente para otros estudios que profundicen y enriquezcan nuestro conocimiento sobre el proceso histórico y cultural que dio origen al relevante acervo de los códices de Guerrero.