El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
Aquí encontrará el lector poemas clásicos de la obra de Darío, como la "Salutación del optimista", la oda "A Roosvelt" y "Lo fatal", todos con la entonación peculiar del modernismo afrancesado que tanto promoviera el nicaragüense, pero con ciertas novedades: un registro más intimista y reflexivo y una temática cívica hasta entonces poco explorada por él.