En la saliva, en el papel, en el eclipse. En todas las líneas. En todos los colores, en todas las jarras. En mi pecho, por fuera, por dentro, en el tintero, en la dificultad de escribir. En la maravilla de mis ojos, en las últimas lunas del sol (pero el sol no tiene lunas), en todo, y decir todo es estúpido y magnífico. Frida Kahlo